¿Pero qué pasa en este país?
Hoy hemos despertado con la noticia de que el yerno del Rey, el imputado de la monarquía por toda una serie de delitos contra el Estado y las haciendas públicas (estatales y autonómicas), ha aceptado una oferta suculenta del seleccionador de Catar, el español Valero Rivera, para formar parte de su "equipo". Al parecer el estar imputado no es condición que impida a este señor abandonar el país y fijar su residencia en un país árabe: no sabemos si tiene estradicción o no. Ya vimos como otro de los imputados "chorizos", el señor Barcenas, se ha paseado por medio mundo haciendo deporte o, quien sabe, si dejando papelitos comprometedores en distintas cajas fuertes de los bancos. Al parecer, todo esta diseñado para que los "golfos" salgan impunes. Los jueces de nuestro país no meten en la cárcel, aunque sea de manera provisional, a nadie por su presuntas irregularidades. Meter a un golfo en la cárcel española se esta convirtiendo en palabra prohibida; tan prohibida como la palabra dimisión.
Entonces, nos volvemos a preguntar: ¿Pero que esta pasando en nuestro país? ¿Qué desastre de justicia tenemos? Al parecer todos se van de rositas; y campan por su fueros. Todo se lo pasan por el "arco del triunfo" de Moncloa; que, por cierto, lo mando hacer Franco. Estamos llegando a una caricatura de país; a una mala fotocopia de lo que es un Estado que se dice moderno y del primer mundo. Por el contrario, esto cada día se parece a una "nación bananera". Y a pesar que los españolitos nos hemos jactado durante años, de mirar a las "repúblicas bananeras" con aires de superioridad; por encima del hombro: ¡Pobre España!
No terminaré de alucinar en colores. Sólo nos falta que mañana Barcenas diga que acepta una oferta de Telefónica y se va a vivir a Brasil; total lo único por lo que esta imputado es por "golfo" y por "chorizo". ¿Donde quedo aquello de: "la ley es para todos igual"? Vaya, que debió ser tan sólo un villancico de Navidad cantado desde Zarzuela.
